Impacto de las no conformidades en costes y rentabilidad

¿Cómo afectan las no conformidades a la rentabilidad de tu empresa?

Las no conformidades no solo suponen un incumplimiento de estándares de calidad, también representan una amenaza directa a la eficiencia, la reputación y la rentabilidad de una organización. Identificarlas a tiempo y gestionarlas correctamente no es solo una obligación normativa: es una oportunidad estratégica para prevenir pérdidas y mejorar la competitividad. 

Whitepaper Modernizar sistema calidad

Qué son las no conformidades y cómo impactan en tu negocio

Una no conformidad es la evidencia de que un proceso, producto o servicio no cumple con los requisitos previamente definidos, ya sea por normativas como ISO 9001 o por especificaciones internas. En la práctica, se traduce en reprocesos, paradas de producción, insatisfacción del cliente o incluso sanciones legales. 

Por tanto, cada vez que aparece una no conformidad, la organización incurre en costes directos —como devoluciones, horas improductivas o scrap— e indirectos, como pérdida de confianza del cliente, imagen deteriorada o desajuste en indicadores clave. 

Dónde suelen generarse las no conformidades

Las no conformidades pueden aparecer en cualquier punto de la cadena de valor. Desde un documento obsoleto utilizado en producción, hasta un registro sin firmar en una auditoría interna. Su origen suele estar vinculado a fallos en los procedimientos, falta de control documental o incumplimiento de las buenas prácticas establecidas. 

Cuando no se dispone de un sistema de gestión adecuado, estos errores se repiten o pasan desapercibidos, afectando tanto al día a día operativo como a los resultados económicos a medio plazo. 

La importancia de una gestión documental estructurada

Una de las claves para reducir las no conformidades está en el control eficaz de la documentación. Si los procedimientos, instrucciones, formularios y registros no están accesibles, versionados y controlados, la probabilidad de error aumenta. 

Con soluciones como ShareMe QMS, basadas en Microsoft 365 y SharePoint Online, las empresas pueden centralizar toda la documentación de calidad, definir flujos de validación y mantener un control riguroso de accesos, caducidades y versiones. Esto no solo previene desviaciones, sino que asegura trazabilidad en cada etapa del ciclo documental. 

Cómo evaluar el riesgo de una no conformidad

No todas las no conformidades tienen el mismo peso. Algunas afectan directamente a la seguridad del producto, otras a la legalidad o simplemente a una mejora continua pendiente. Por ello, es fundamental contar con una herramienta que permita clasificar y priorizar las incidencias en función de su impacto y probabilidad. 

ShareMe permite incorporar criterios de evaluación del riesgo en los flujos de gestión de no conformidades, de forma que los responsables puedan actuar con criterio, asignar recursos eficientemente y tomar decisiones informadas.

La causa raíz como eje de mejora continua

Identificar la causa raíz es fundamental para evitar la repetición de errores. No se trata solo de corregir la desviación puntual, sino de entender por qué ha ocurrido y qué se puede cambiar para evitarlo en el futuro. 

En ShareMe QMS, los formularios digitales permiten registrar acciones correctivas y preventivas asociadas a cada no conformidad, vinculando responsables, fechas, documentos de soporte y seguimiento. Este enfoque facilita auditorías internas y externas, a la vez que refuerza la cultura de calidad dentro de la organización. 

Cómo un QMS digital puede reducir los costes por no conformidades

La digitalización del sistema de calidad no solo aporta eficiencia, también reduce errores humanos, elimina duplicidades y acorta tiempos de reacción. Cuando todo el proceso de gestión de no conformidades está automatizado —desde la detección hasta el cierre— la empresa gana en agilidad y capacidad de análisis. 

ShareMe, al estar totalmente integrado con el ecosistema Microsoft 365, permite que cualquier usuario pueda notificar una desviación desde su entorno habitual (Teams, Outlook, SharePoint), sin necesidad de cambiar de plataforma. Esto acelera la respuesta, mejora la trazabilidad y asegura la participación activa del equipo. 

Además, los dashboards e informes automáticos facilitan el seguimiento de indicadores clave (número de no conformidades abiertas, tiempo medio de resolución, reincidencias…), lo que permite identificar patrones y tomar medidas estratégicas.

Alineación con las normativas ISO, GMP y FDA

Uno de los principales riesgos de las no conformidades es su impacto en el cumplimiento normativo. Las auditorías ISO 9001, GMP o FDA no solo exigen evidencias de los procesos, también esperan ver un sistema de control eficaz sobre las no conformidades detectadas y cómo se han tratado. 

ShareMe está diseñado para cumplir con los requisitos más exigentes en materia de trazabilidad, seguridad y registros electrónicos. Cada acción queda auditada, cada documento está controlado y cada flujo está alineado con las buenas prácticas de la industria regulada. 

¡Solicita información sin compromiso!

¡Rellena el formulario y explícanos qué necesitas!

Tu privacidad es importante para nosotros...